Receta para una videoconferencia

Ingredientes:
- Dos cámaras web
- Dos ordenadores
- Dos micrófonos
- Dos pizarras digitales (opcional).
- Dos grupos de niños en distintos lugares.
- Conexión a internet en ambos sitios.

Preparación:

Se concierta un horario para coincidir al conectar. Esto es importante, pues de lo contrario puede que un grupo espere con cara de bobo durante horas sin resultado alguno.

Llegado ese momento se conectan ambas cámaras web y las pizarras si se dispone de ellas, para que el grupo vea bien a los niños del otro (si no tienden a acercarse peligrosamente al ordenador para distinguir las caras).

Nosotros hemos usado el chat de vídeo de gmail, pero es perfectamente válido cualquier otro, como Skype.

Se procede a mantener una conversación civilizada. Un buen sistema es que los chicos se acerquen al micro de manera individual a ambos lados de la pantalla.

A partir de aquí los tiempos y contenidos de la conversación son a gusto del consumidor. Prestar atención a los elementos más radiactivos de cada grupo, pues tienen tendencia a monopolizar el micro y la cámara, con resultado de gritos inconexos y risotadas varias.

Sensu contrario, es buena idea animar a los más tímidos, que se quedarán detrás y a cierta distancia del micro.

Apagar cuando el nivel de excitación exceda el soportable por el adulto que coordina.

Puede quedar algo como esto: